Actividades: Normas
9 enero, 2000Web y Blog amigas
14 enero, 2000MSPE de dos niños de distinta edad
Hacía años que tenía claro que sería mamá. Y llegó un momento en que no pensaba en otra cosa aunque no tenía pareja. Le dí vueltas y más vueltas y solita me fui liando la manta a la cabeza. Pasados nueve meses en los que mas parecía que la manta me la hubiera liado en el vientre, tuve a mi hija.
No voy a describiros la cantidad de sensaciones maravillosas que descubrí en ese momento. Era lo que siempre había querido, pero era más, era diferente, era mejor y era aún más cansado de lo que creía. Todo el esfuerzo del mundo era compensado con creces.
En aquel momento no conocía a ninguna mamá sola y a veces necesitaba compartir cosas relativas a mi familia y la crianza con personas que me entendieran. Siempre he estado rodeada de amigos y familia, pero nadie estaba en mi situación.
La pequeña poco a poco fue creciendo y cumplió un año, después dos y luego tres…y comenzó a hacerse mas “independiente”. La crianza se estaba haciendo más llevadera. Nuestro día a día era relativamente fácil y nos habíamos acostumbrado a la vida “la una con la otra”. En nuestra familia “chiquitilla” nos lo pasábamos de maravilla.
Pero ocurrió algo con lo que no contaba: mis deseos de ser madre que desde hacía tres años estaban dormidos volvieron a aparecer …y con ellos nuevos miedos. Pero ¿dónde voy con dos?, ¿podré sola?, ¿y cuando el bebé se ponga malo?, ¿y si tengo un embarazo con problemas,…que haré con mi niña?…y pasaba el tiempo.
Ahora conocía a muchas mujeres que eran mamás solas, primero a través de “nuestro foro de msn”, después en persona, después a través de esta asociación. Ya no me sentía nada sola en cuanto a la familia que había formado, estaba rodeada de una red de madres que nos brindábamos apoyo. Aunque en aquel momento no conocía a ninguna que “se hubiera lanzado a por el segundo” sí que conocía a varias que habían tenido “dos primeros”. Entre nosotras las llamábamos “las de mellis”. Y si ellas podían… ¿por qué no yo?
Poco antes de que mi hija cumpliera cuatro años tomé por segunda vez la decisión más importante de mi vida: iba a tener un hij@. Busqué una nueva manta que liarme durante nueve meses a la cabeza (y al vientre)…y me la lié.No le dije nada a mi familia porque sabía que si bien no entendían la decisión, y la veían como “un capricho” a la hora de la verdad se alegrarían y me apoyarían.
No sé porqué, pero la decisión de tener un segundo hijo fue menos comprendida que la de tener al primero. Escuché cosas como: Pero si ya eres madre ¡pues ya está!, ¡qué ganas de complicarte la vida!, ¡con lo bien que vivís las dos! ¡No es tan fácil ayudarte si tienes dos!…Pero la decisión estada tomada y el bebé en camino…
Y el bebé terminó su camino, nació y ya va para su segundo cumpleaños. También ésta ha sido la mejor decisión de mi vida. Formamos una familia de tres que me genera un poco de estrés. Disfruto viendo la relación que tienen entre ellos, cómo aprende el pequeño de su hermana, cómo, a pesar de la diferencia de edades, ya juegan juntos…y lo más importante de todo: Somos Felices.
Marisa (Madrid)
MSPE de una niña de 6 años y de un niño de 2 años